Complicaciones más frecuentes durante la gestación subrogada
En pleno siglo XXI, en donde la tecnología reina y la modernidad hace de las suyas, la gestación subrogada, como técnica de reproducción asistida, sigue generando choque de opiniones. Su aplicación se debate a menudo en un sinnúmero de controversias que vislumbran posibles consecuencias; médicas, físicas, psicológicas y éticas.
Teniendo en cuenta los efectos que se producen para todos los involucrados en el proceso; gestante sustituta, padres y bebé, se comparten en este artículo las complicaciones más frecuentes durante la gestación subrogada.
Complicaciones médicas
Médicamente, la gestación subrogada es similar a un embarazo por fecundación in vitro (FIV). La diferencia subyace en que el embrión se transfiere al útero de una mujer que solo será gestante, y no madre. Siendo así, los riesgos para la gestante, son los mismos que enfrenta cualquier embarazo natural y los mismos asociados a un proceso de transferencia embrionaria.
Los padres de intención estarán expuestos a riesgos negativos en la obtención de los gametos: óvulos y espermatozoides. Siempre es bueno entender que recoger los óvulos es complejo, que existen riesgos, pero sin consecuencias graves.
Complicaciones físicas
Llamarlas complicaciones, podría sonar exagerado. Sin embargo, es bueno asignarles la categoría de cambios. Cambios generales y físicos como la hinchazón, el aumento de peso, modificaciones en el apetito y la sensibilidad. Cosas que generalmente le suceden a las embarazadas.
La gestante debe estar dispuesta a asumir las consecuencias que genera un embarazo. Algunos cambios físicos, como las estrías, cicatrices y el aumento de peso, son irreversibles. Por ello, y ante el objetivo de ayudar a otras personas, la gestante debe estar dispuesta a pasar por estas incomodidades.
Complicaciones psicosociales
El proceso reproductivo de la gestación subrogada, contempla que una mujer gestará el bebé de otra persona o pareja, en su vientre. Y luego, tras su nacimiento, lo entregará.
Como ves, este es un procedimiento fuera de lo común, que deja a un lado el rol de madre tradicional. Como consecuencia de esto, surgen algunas inquietudes, en la que prevalece el riesgo psicológico que corren las personas que recurren a esta técnica, y por supuesto, la persona gestante.
Aunque la gestación subrogada se realiza previo consentimiento de la gestante, existe un vínculo materno-fetal. Dicho vínculo se fortalece gracias a la relación fisiológica o física que existe entre el bebé y la mujer que lo gesta. Por lo que es casi imposible que no se genere un choque de sentimientos al momento de entregar al pequeño.
Por otra parte están las críticas que a nivel social recibe la gestación subrogada. Las opiniones son diversas, algunos creen que el procedimiento no es más que un negocio, en el que el vientre, o el cuerpo de la mujer, son vistos como una mercancía.
Lo cierto es que el procedimiento de gestación subrogada no debe ser entendido desde un enfoque comercial. Este es un proceso que goza de todas las garantías legales y en el que la gestante y los futuros padres, actúan en el pleno uso de su libertad y conciencia.
Por todo lo anteriormente expuesto, se hace necesario adelantar este tipo de procedimientos en centros especializados en donde brindan el respaldo de profesionales preparados que puedan acompañar a las partes involucradas en el proceso. En Colombia, Sur América, se encuentra Celagem, una institución que ofrece el tratamiento de subrogación, guiado por un completo equipo que trata en detalle todos los posibles efectos que pueda conllevar la gestación subrogada.