La gestación subrogada se ha convertido en una solución clave para parejas heterosexuales con problemas de infertilidad y para parejas homosexuales masculinas. Este método de reproducción asistida es uno de los más utilizados a nivel mundial, y la paternidad genética juega un papel esencial en su éxito.

Los pacientes tienen a su disposición varios métodos para transmitir su material genético al niño, garantizando la continuidad de sus genes en futuras generaciones. Este avance en la medicina ha permitido a muchas personas, que antes no tenían la posibilidad de ser padres, experimentar la paternidad.

Aunque la maternidad subrogada comenzó a finales de los años 70, su evolución ha mejorado tanto la efectividad médica como legal del proceso. A pesar de estos avances, la legalidad varía entre países, lo que lleva a muchas parejas a buscar opciones en el extranjero.

A continuación, profundizaremos en la paternidad genética y en por qué se ha convertido en la opción preferida para muchas parejas, incluyendo las homosexuales.

¿Qué es la paternidad genética?

Todos nacemos con un patrón genético heredado de nuestros padres, que determina nuestros rasgos y características. Gracias a las técnicas médicas modernas, es posible transmitir este material genético incluso si el desarrollo de los embriones ocurre de manera artificial, mediante la fecundación in vitro.

En algunos países como Ucrania, se requiere que el padre comitente aporte su material genético para la gestación subrogada. Si existe alguna alteración que impida su participación, no se puede continuar con el proceso. Esto es porque se exige que el bebé tenga al menos los genes del padre para realizar la prueba de paternidad y otorgar la custodia total.

¿Por qué es importante en un proceso de gestación subrogada?

El mayor atractivo de la gestación subrogada radica en la posibilidad de transmitir los genes al nuevo miembro de la familia. En tiempos pasados, las parejas infértiles no podían optar por esta técnica, y la situación era aún más complicada para las parejas homosexuales debido a las prohibiciones sobre el matrimonio.

Hoy en día, las parejas con dificultades reproductivas pueden recurrir a la maternidad subrogada para compartir sus genes con el nuevo miembro de la familia. Aunque puede ser un desafío emocional para las mujeres que no llevan el embarazo, este proceso se ha vuelto más accesible y aceptado, incluso para parejas homosexuales en países donde el matrimonio es legal.

Además, los hombres y las madres solteras también pueden formar familias monoparentales a través de la maternidad subrogada.

¿Qué ocurre si yo o mi pareja no puede donar el material genético?

Si alguno de los pacientes tiene material genético defectuoso, es necesario recurrir a un donante para garantizar altas tasas de éxito. Este paso es crucial para asegurar el desarrollo de embriones sanos. Las pruebas médicas determinan qué material genético será seleccionado.

¿Qué tratamiento se utiliza para recolectar el material genético?

Para las parejas heterosexuales, diversas condiciones pueden hacer necesario un tratamiento de reproducción asistida. A veces, el problema no está en el material genético, sino en otras áreas, como la cavidad uterina o la próstata. En estos casos, el material genético puede ser donado sin problemas.

Para recolectar los óvulos, la paciente debe someterse a una aspiración transvaginal. En el caso de parejas homosexuales, pueden elegir un donante o donar material genético ambos miembros, dependiendo de la agencia de subrogación seleccionada.

¿Qué es la fecundación in vitro?

La fecundación in vitro es el método clave para lograr la paternidad genética. En este proceso, el óvulo se fertiliza con el espermatozoide en un laboratorio bajo condiciones controladas. Los embriones resultantes se implantan en el útero de la gestante, y este desarrollo embrionario puede durar de 3 a 4 días.

Adopción y subrogación

Antes de la llegada de la subrogación, la adopción era la única opción para parejas infértiles. Sin embargo, este proceso puede tardar hasta 5 años y no ofrece control sobre el nacimiento ni los primeros meses del bebé. Aunque la adopción es una opción altruista y válida, muchas parejas prefieren la subrogación para transmitir su carga genética y vivir esta experiencia de manera más directa.

Ambas opciones tienen sus propias ventajas y desventajas, y la elección dependerá de las circunstancias y deseos de cada pareja.

Conclusiones

La paternidad genética en la subrogación es un factor clave para quienes buscan convertirse en padres. Tanto parejas heterosexuales, homosexuales como personas solteras pueden beneficiarse de este tratamiento para comenzar su viaje hacia la paternidad.

Para obtener más información sobre la gestación subrogada, visita Grandes Corazones, y para conocer más sobre la donación de óvulos, visita Make a New Family.

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